Isco recae de su peor problema

El centrocampista española del Real Madrid Isco Alarcón vuelve a las andadas y pone de nuevo en alerta a muchos en elSantiago Bernabeú

Isco Alarcón
Isco Alarcón

Isco Alarcón es uno de los nombres que, desde que llegó al Santiago Bernabéu hace ya unos años, siempre ha estado en el punto de mira en el club blanco. Entre otras cosas porque, como bien apuntan desde el entorno del Madrid, su actitud no ha sido siempre la más adecuada.

Ha habido momentos, como cuando Solari estaba al mando del equipo, que Alarcón ha estado de hecho apartado y apenas ha contado. No es ningún secreto que uno de los problemas del español, que tiene calidad de sobras para ser titular en el Bernabéu, es su faceta física y su vida más allá del balón.

Al contrario que otros jugadores como Sergio Ramos o Karim Benzema, entre otros, Isco no es un tipo que acude de forma habitual al gimnasio. Además, cuentan, es un jugador que no acepta precisamente bien las críticas y que tiene un ego quizás por encima de lo normal.

Isco y Zidane, de nuevo en problemas

Algo que Zinedine Zidane ya no está dispuesto a aceptar. En la segunda etapa del técnico francés en el Real el vestuario ya no es el mismo. Tras la salida de Cristiano Ronaldo, los clanes se han difuminado y ahora el buen rollo impera.

Eso sí, Zidane tiene muy claro que los que juegan lo hacen porque se lo merecen. En este sentido, la actitud y la implicación de Alarcón, que más de uno en la directiva lo habría vendido ya este mismo verano, no ayudan.

Isco Alarcón
Isco Alarcón

No es un problema nuevo. Fue hace ya un tiempo cuando el periodista Juan Luis Galiacho apuntó que muchos veían a Isco como un “egoísta” y como un “traidor”. Un problema que, eso sí, parece que Zidane ya no quiere resolver. Debe de ser el jugador el que cambie el chip. Sino lo hace, el míster no tendrá problema alguno en seguir dándole un rol secundario.

Jugadores como Sergio Ramos o Benzema ya le han hecho saber a Zidane que no están dispuestos a pasar de nuevo por otra polémica con el mediapunta. Veremos si Isco, en el que todo apunta que será su último año vestido de blanco, decide dar un paso adelante.