Isco apunta a la cabeza de dos pesos pesados del Real Madrid

El crack malagueño está cansado de cargarse el equipo a las espaldas

Harto. Isco Alarcón está a punto de estallar. El eterno discutido en la lucha por ganarse la titularidad del Real Madrid es ahora el jugador más aclamado. El que luce galones sobre el campo.

Fuera del terreno de juego ya se sabe que no le corresponde a él tener el protagonismo. Para eso ya están los pesos pesados, vacas sagradas y cargos vitalicios que se encargan de ostentarlo.

Pero a la hora de la verdad, quien lava los trapos sucios en el Barça no es otro que Isco. El crack malagueño, convertido en el compás sobre el que gravita todo el Madrid.

El de Benalmádena juega mejor que nadie, marca los tempos, asiste, define y marca goles decisivos. Pero no lo puede hacer todo.

Su gran drama es que juega con dos colosos como Cristiano Ronaldo y Benzema, pero no hay manera de encontrarlos. Se desmarcan cada vez peor y ralentizan el juego.

Cansado de la BBC

Frente al Girona, Isco fue un obús. Incombustible, lo intentó de todas las maneras. Trató de hacer magia por todos los medios. Pero era imposible. Cristiano y Benzema no ayudaban.

La BBC está acabada. Gareth Bale ni siquiera juega, se pasa más tiempo lesionado en la enfermería. Y los otros dos, están desubicados. Corren sin ton ni son, como pollo sin cabeza.

El internacional español está cansado de esta situación, pero no sabe como ponerla remedio. Solo en charlas privadas con sus amiguetes se atreve a señalar esas dos cabezas intocables.

Una de ellos, la de Cristiano, es la que le quiso fuera del Real Madrid para favorecer a James Rodríguez. Situaciones delicadas con las que Isco debe lidiar, remando a contramarea.