Florentino Pérez lo saca a subasta para hacer caja, pero nadie puja por este jugador del Real Madrid

El nombre que se ha convertido en un dolor de cabeza para el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez

Florentino Pérez
Florentino Pérez

Florentino Pérez sabe muy bien que, como ocurrió el verano pasado, en los próximos meses va a tener que hacer gala de su habilidad ara negociar la compra y, sobre todo, la venta de algunos de sus jugadores.

Y es que no son pocos los nombres en el Real Madrid que, sea quien sea el entrenador que acabe tomando el mando, tiene pie y medio fuera del Santiago Bernabéu. Uno de ellos es precisamente un jugador que, seguro, se ha alegrado de la marcha de Zinedine Zidane: Dani Ceballos.

Florentino Pérez y la salida de Dani Ceballos

Y es que no es ningún secreto que el mediapunta español y el técnico francés no se llevaban precisamente bien. Más bien todo lo contrario. Zidane nunca creyó en Ceballos y el jugador le pidió al club que lo cediera.

Así, se marchó cedido a un Arsenal donde ha demostrado que, con minutos y confianza puede ser una pieza importante. Pero la cesión ha acabado y Dani tiene que regresar al Madrid. Eso sí, el jugador ya le ha dejado claro al club que no quiere saber nada del Real, entre otras porque sabe que no tendrá minutos garantizados.

Dani Ceballos
Dani Ceballos

Es por eso que Florentino, que sabe que necesita sacar dinero de donde sea para poder hacer frente a varias operaciones top este verano, ha dejado claro que Ceballos está en venta.

Eso sí, al menos de momento, nadie está dispuesto a pujar en esta subasta del presidente blanco, que ha empezado en unos 30 millones de euros. Ceballos, cuentan, estaría encantado de volver al Betis, pero ni su ficha ni el precio del Real son asumibles por la entidad verdiblanca.

La opción de que el Arsenal lo fiche también está ahí, pero los ingleses ya han dejado claro que sólo se harán con él si el precio es muy inferior. Todo apunta así a que, por mucho que Zidane ya no esté al mando, Dani Ceballos va a seguir siendo un dolor de cabeza para Florentino Pérez.