Florentino Pérez despelleja a tres intocables del Real Madrid de Zidane en el palco del Bernabéu

La victoria frente al Valencia no salva la ejecución de algunas cabezas que van a ser cortadas

Muerto el perro, se acabó la rabia. Este tradicional dicho del refranero español bien podría cobrar importancia, muy pronto, en el vestuario del Real Madrid. Abunda la rabia.

Los egos por las nubes de muchos jugadores complican el trabajo a Zinedine Zidane, que ha hecho un máster en gestión de fuertes personalidades pero se le empieza a ir de madre.

Este sábado en el Bernabéu tuvo un nuevo problema al dejar a Isco en el banquillo. El malagueño, coronado mejor jugador del partido cada vez que Zidane le da minutos, no puede más.

Las voces más autorizadas aseguran que hasta Florentino Pérez da síntomas de incredulidad por lo que está ocurriendo. En el palco del Bernabéu ante el Valencia su cara fue un poema. «Jugando así no ganaremos nada», se escuchó entre corbatas. 

El presidente blanco, que disfrutó de la victoria, no vio sobre el césped el nivel de juego que siguió desde el televisor el pasado miércoles, cuando los suyos jugaban en La Coruña.

Ya entonces, y desde hace algunas semanas, Florentino señaló a tres intocables del Madrid. Jugadores que han dado mucho pero que experimentan un fuerte bajón. Cuestión de edad.

La CBM, señalada

Los tres cracks blancos que cada vez dan menos la talla son Cristiano Ronaldo, Karim Benzema y Luka Modric. Tres pilares cuyos cimientos se están desintegrando.

Están en descomposición y todo el Bernabéu se ha dado cuenta. También el presidente. De hecho, el propio Cristiano será el encargado de ejecutar a Benzema.

Y Marco Asensio se quedará el sitio de Cristiano. Pero aún así, otro crack llegará en verano para postular como candidato a la delantera de oro: Mbappé, Dybala o Aubameyang.

También suena Eden Hazard, que podría terminar de condenar al banquillo a Modric. El croata no estuvo mal ante el Valencia, pero ya no marca las diferencias como antes.

Peligra la Champions

Isco le pasa la mano por la cara en todas las faectas actualmente, pero Zidane sigue apostando por los de siempre. No se atreve a mover el esquema.

La única realidad es que en casa y ante un Valencia en horas bajas, el Madrid jugó mucho peor que contra el Deportivo en Riazor. Las alineaciones fueron totalmente distintas.

Lo peor de todo, advierte Florentino, es que le llega el turno al Atlético de Madrid. Si las vacas sagradas siguen en escena, la eliminatoria será muy sufrida para los blancos.