Florentino Pérez desmonta al Barça con una última filtración (¡Ojo con Valverde!)

El presidente blanco apunta un motivo para el declive culé

Son tiempos felices para el aficionado madridista, y todavía más para Florentino Pérez. El presidente del Real Madrid vive los años de más éxito al frente del club blanco y contemplan con jolgorio el desastre del eterno rival.

Desde que volvió a la presidencia en 2009, fijó una idea en su mente que pretendía diferenciar de su anterior etapa en la presidencia. Debía ser más cauto e intervenir menos en las decisiones deportivas.

La palabra final de Florentino es la que dicta todo cuanto pasa en el Santiago Bernabéu, pero el magnate blanco sí ha tratado de tocar lo menos posible en los últimos años. Pese al desvarío de Rafa Benítez, el Madrid vive años de normalidad con la línea afable de Carlo Ancelotti y Zinedine Zidane.

La estabilidad que trata de imponer en la estructura del club se transmite en el campo, donde Zidane ha podido conformar un bloque compacto que juega de memoria. El Barça, en cambio, da vueltas a su identidad y Florentino Pérez cree que ahí está una de las razones de su desvarío durante esta temporada.

Los cambios de sistema

El desconcierto es tal en el Camp Nou que Ernesto Valverde se ha visto obligado a utilizar hasta cuatro sistemas en tres partidos oficiales. Dos de Supercopa de España frente al Madrid y uno de liga ante el Betis.

Del 4-3-3 habitual Valverde pasó al 3-5-2 en el partido disputado en el Bernabéu. El baño blanco le obligó a mutar en un 4-4-2 que en el debut liguero del Barça se transformó en un 4-2-3-1.

Para Florentino, tanta variable táctica refleja la descomposición del equipo. Valverde puede probar con cuantas formaciones como quiera, pero sólo conseguirá confundir a sus jugadores.

El Real Madrid de Zidane, por ejemplo, cayó de la Copa del Rey el mismo mes en que el técnico trató de implementar un 3-5-2 que su equipo no sabía gestionar. Desde el bloque se consiguió armar un fortín, y mientras Valverde siga experimentando, el Barça sufrirá las consecuencias.