El único (y verdadero) motivo por el que Florentino Pérez no ha echado todavía a Zidane

En el Real Madrid bajan aguas turbulentas. El futuro de Zinedine Zidane está en el aire. Tanto como la continuidad del conjunto blanco en la Champions League, después de perder ante el Shakhtar Donetsk. Y en la capital de España se hable de la posible destitución del técnico en las próximas semanas. No obstante, Florentino Pérez está esperando a que sea el propio técnico el que mueva ficha como hizo en verano de 2018. Y es que tiene un buen motivo para no destituirlo.

En junio de 2018 Zidane pilló por sorpresa a Florentino Pérez y a todo el madridismo cuando presentó su dimisión. Acababa de ganar la tercera Champions League consecutiva y la sorprendente decisión dejó a Florentino con la cara más desencajada que se le ha visto jamás.

Ahora, dos años y casi medio después, ZZ vuelve a entrenar el Madrid, pero el equipo no anda por buen camino. Y en la cúpula andan deseando que se repita lo ocurrido en 2018.

El Real Madrid espera a que Zidane dimita

Los blancos están firmando una primera mitad de temporada nefasta. Y en el Santiago Bernabéu ya se habla de la posible destitución del técnico. Consideran que la situación no tiene salida. Que si la gente pudiera ir a los estadios ya habría dictado sentencia. Y opinan que hoy por hoy enderezar la situación solo pasa por cambiar de entrenador. Son conscientes de que si la cosa no cambia en las próximas semanas, no tendrán otra que disolver el contrato con el míster francés.

Florentino y la planta noble, obviamente, desearían que los resultados fueran positivos y no tener que preocuparse de la situación deportiva y de una posible destitución. Pero el panorama les tiene deseando que sea el míster el que dé el primer paso.

Una razón de casi 35 millones de euros

Porque si no lo hace, será el club el que tendrá que tomar una decisión. Y ello le puede costar al club 34,8 millones de euros.

Zidane tiene contrato con el Madrid hasta junio de 2022 a razón de 16 millones de euros netos por temporada, con lo que a estas alturas le quedaría por cobrar unos 24 ‘kilos’. Y ese es el finiquito que la entidad merengue tendría que abonar al francés si es despedido, que en cifras brutas se sitúan en los 34,8 millones. Y esa es la principal razón por la que Pérez todavía no ha echado a Zidane.

Cabe decir que en el Real confían en que llegado el día, si no dimite, el galo aceptaría llegar a un acuerdo y no reclamar toda esa cantidad al club. Pero también es cierto que los responsables no las tienen todas. Y hasta que no haya remedio, no tantearán a la suerte.