El último as en la manga del Madrid para seguir en la Copa

El presidente del Real Madrid es mal perdedor. Florentino Pérez no lleva bien claudicar y aceptar la derrota. Mucho menos cuando cree que es injusta. Y menos, aún, cuando considera que tiene argumentos para obtener un resultado más favorable. Esto es, cuando sabe que puede tirar de contactos e influencias. Todo ello motiva que el Real Madrid haya decidido acudir a la justicia ordinaria para impugnar la decisión del TAD de excluir al equipo de la Copa del Rey.

El club blanco planea acudir ante la jurisdicción contencioso-administrativa para salvar al Madrid. El objetivo es conseguir que el equipo mantenga intactas las aspiraciones al triplete. Sin embargo, una cuestión tan estrictamente deportiva parece difícil de defender ante las instancias judiciales. Más, teniendo en cuenta que tanto el juez único de competición, como el comité de apleación como el TAD han coincidido en señalar que el Madrid debe ser eliminado.

Esta acción se vislumbra como la única forma de seguir vendiendo a los socios del Madrid la teoría de que el club hizo las cosas bien y de que en ningún momento debió ser castigado. Florentino asume el papel de víctima y defiende que las instituciones deportivas –Villar no es santo de su devoción, ni a la inversa– están en su contra. En contra del Madrid.

Así de contundente se ha mostrado el club en un comunicado enviado tras conocer la resolución desfavorable del TAD: «El club respeta pero no comparte esta resolución del Tribunal y por eso comunica su decisión de acudir a la vía contencioso-administrativa, al margen de otras posibilidades legales, que se encuentran en estudio».