El sueldo de Iniesta se convierte en un problema para el área económica del Barça

El club se ha comprometido a congelar la masa salarial de los deportistas y podría poner en venta al centrocampista

Andrés Iniesta es uno de los futbolistas más queridos por la afición del Barça, pero su elevado sueldo (18 millones de euros anuales) es un problema para la junta directiva que preside Josep Maria Bartomeu y, sobre todo, para el área económica. El club se ha comprometido a no aumentar la masa salarial destinada a los deportistas, cifrada en 419 millones, y deberá afrontar una costosa renovación de Neymar. Las cuentas no acaban de cuadrar y en los despachos del Camp Nou, según ha podido saber Diario Gol, no se descarta la posibilidad de poner en venta al centrocampista de Fuentealbilla.

El Barça repitió el mismo guión que anteriormente escribió con futbolistas muy queridos por la afición azulgrana como Puyol y Xavi. Ambos lograron los mejores sueldos en la etapa final de su carrera, cuando su protagonismo en el equipo era menor. El centrocampista, no obstante, tuvo un papel importante en el triplete de la pasada temporada. El defensa abandonó el fútbol por culpa de sus lesiones y perdonó un año de contrato. Es decir, unos 10 millones de euros.

En diciembre de 2013, el ex presidente Sandro Rosell también premió a Iniesta por los servicios prestados. No se conformó con multiplicar su salario, sino que le ofreció un contrato garantizado hasta 2018, con opción de prorrogarlo en 2020, en función de los partidos disputados. Es decir, Iniesta se ha comprometido con el club azulgrana hasta los 34 o 36 años.

En busca de un sustituto

Algunos directivos del Barça sostienen que Iniesta ya alcanzó su máximo rendimiento. Ahora tiene 31 años y, posiblemente, todavía puede aportar mucho al equipo durante esta y la próxima temporada. Luis Enrique, el actual técnico azulgrana, considera que el manchego es una pieza básica en sus esquemas, pero la dirección técnica que lidera Robert Fernández ya sondea el mercado para buscarle un sustituto.

En los despachos del Camp Nou, mientras, esperan que Iniesta complete otra gran temporada. En verano de 2016 deberán decidir si escuchan o no ofertas por él. Su elevado salario, no obstante, dificultará su salida del club. O, en el mejor de los casos, rebajaría el precio de un hipotético traspaso.