El relevo de Zidane no cuenta con Sergio Ramos: bombazo en el Real Madrid

El nombre que barajan en el Real Madrid como sustituto de Zidane no quiere saber nada de Sergio Ramos

Sergio Ramos
Sergio Ramos

Si bien es cierto que, al menos en teoría, no es que sea precisamente la situación ideal dadas las alturas de temporada en las que nos encontramos y a falta tan sólo de tres partidos para que acabe el curso, en el Real Madrid no se sabe aún quién será el entrenador de la temporada 202122.

La continuidad o no de Zinedine Zidane está encima de la mesa de Florentino Pérez que, si bien es cierto que debe decidir aún quién estará en el banquillo el próximo curso, sí que tiene claro que el Madrid necesita sangre nueva y un nuevo proyecto.

Ahí es donde aparecen tres nombres, los de tres técnicos que son los que mejor colocados están para hacerse cargo del Real siempre y cuando Pérez opte por cesar a Zidane.

Raúl no quiere a Sergio Ramos en el Real Madrid

Por un lado, aparecen dos técnicos de renombre, con experiencia y muchas tablas: Joachim Löw y Antonio Conte. Por otro, un tipo de la casa, una leyenda del madridismo que, además, está ganándose el respeto de la directiva por su buen hacer en el filial: Raúl González Blanco.

Un Raúl al que la directiva, evidentemente, ya ha sondeado de cara a la posibilidad de que se haga con las riendas del primer equipo. Como no podía ser de otra manera, el ex jugador blanco ha dejado muy claro que aceptaría sin problemas el cargo. Eso sí, Raúl también ha dejado muy claro que, para aceptar el cargo, deberían cumplirse una serie de condiciones.

Raúl González
Raúl González

Y una de ellas es que el Madrid no renueve  a Sergio Ramos. Raúl sabe muy bien del peso de Ramos en el vestuario, y es consciente de que, para que el club blanco empiece otro nuevo ciclo triunfal, deberá hacer una limpieza en Valdebebas y que jugadores con peso o veteranos como Ramos, Marcelo o Isco, entre otros, hagan las maletas.

El técnico del filial sabe que la economía del Real no da para mucho, pero preferiría apostar por jugadores jóvenes que conoce muy bien del filial, que llegarían ‘limpios’ en cuanto a ganas antes que seguir contando con jugadores que, en los últimos tiempos, han sido protagonistas más por sus polémicas que por su juego.