El oscuro negocio en la trastienda de la cantera del Barça

Xavi Simons es el último ejemplo de los movimientos de los clubes con los niños

El interés del Chelsea por la perla de la Masía, Xavi Simons, saca a la luz los negocios oscuros que se mueven en el fútbol base. Niños que son tratados como mercancías y que, en muchos casos, terminan en juguetes rotos. O, peor, engañados, y con los padres arruinados. Este es el motivo por el que la FIFA se pone tan dura en la transferencia de menores, y por el que castigó al Barça a modo de ejemplificar, a pesar de que en el club azulgrana el trato con los padres y los jugadores es exquisito. No así en clubes con menos escrúpulos, especialmente de otros países sin control.

El padre de Simons, el ex jugador del Ajax Regilio Simons, ha confirmado el interés del Chelsea y la buena oferta económica por su hijo. No interesa. No necesitan dinero y están en el mejor club del mundo en la actualidad. Más allá de estas declaraciones, Regilio ha destapado la cara oscura del negocio del fútbol, algo que «no se puede detener».

Debajo de las piedras

«Los agentes están en todas partes», ha explicado Regilio Simons. Antes, cuando Xavi era más pequeño, y ahora se acercan para hacer ofertas por el chaval. Se ofrecen como agentes. Algunos lo son; otros, no y se valen de la buena fe y de las necesidades económicas para hacer negocio a costa de los menores.

Se las saben todas. «Este es el mundo del fútbol ahora. No se puede detener. Para muchos de los padres debe ser difícil. Sucede rápido y si uno necesita dinero y los clubes te ofrecen grandes cantidades, tiene sentido decir que sí». Los agentes (y los supuestos) incluso ofrecen casa y trabajo en los clubes. Algunos de estos representantes tienen el simple cometido de ensuciar, de alterar la tranquilidad de algún club. Hecha la ley, hecha la trampa.