El lugar secreto donde se reúnen los pesos pesados del Real Madrid para conspirar contra Rafa Benítez

Los Cristiano Ronaldo y Sergio Ramos, entre otros, sacan provecho de las altas medidas de seguridad de su lujoso complejo de seguridad

La Finca es como se denomina la ostentosa urbanización residencial ubicada en Pozuelo de Alarcón. Un complejo de casas de lujo diseñado por el arquitecto Joaquín Torres, del despacho A-Cero –también diseñaron la casa naval de Víctor Valdés en Gavà Mar–, donde se ubican prácticamente todos los jugadores del Real Madrid. En el sector 3.1, la zona de alto standing también conocida como los Lagos I, vive Cristiano Ronaldo.

La sofisticación de la obra y el avanzado sistema de seguridad, a cargo de la compañía Insetel, resguardan la entrada a todas las zonas de la casa, cuyas puertas solo se pueden abrir con una tarjeta exclusiva. El acceso a las habitaciones está restringido a personas muy concretas. Los inmuebles construidos en ese sector tienen un precio de salida alrededor de los seis millones de euros. Gareth Bale, Karim Benzema, James Rodríguez, Tony Kroos y Sergio Ramos viven en la misma ubicación.

Los tres cabecillas

Tres de estos jugadores son los cabecillas de la rebelión del vestuario contra Benítez: el capitán Ramos, Cristiano y James. Benzema, algo más solitario, los secunda. Aunque ahora está por otros menesteres. Aprovechan ese avanzado y meticuloso sistema de seguridad para reunirse en casa de uno o de otro y despotricar sobre los métodos de Benítez, con quien no comulgan. Lo quieren fuera.

Otra zona en la Finca un peldaño por debajo en lo que a lujo se refiere es el sector 2.2, más conocido como los Lagos II. Allí viven Álvaro Arbeloa y Jesé Rodríguez, entre otros, en casas a un precio de mercado de entre tres y cuatro millones.

Jesé también conspira

Uno de los jóvenes, que también ha chocado recientemente con el técnico español, se ha unido al escamote. Es Jesé, que como se acaba de mencionar, también vive en la Finca, aunque en otro sector algo más alejado. Pero cualquier excusa es buena para sacar a pasear sus lujosos vehículos.

El delantero canario está en una etapa difícil. Le gusta la música, rapear, salir con sus amigos, su novia, y la falta de sintonía con el entrenador le ha llevado a dejarse llevar cada vez más hacia el mundo de la noche. Ello, y que no es pez gordo, hace que no sea habitual de las reuniones. Pero a veces se cuela.