El fax que evitó el fichaje de Busquets por el Real Madrid

El centrocampista azulgrana pudo vestir de blanco, pero lo evitó una gran jugada de ajedrez

Sergio Busquets es uno de los jugadores más apreciados por la afición del FC Barcelona. Titular indiscutible desde 2009 y, actualmente, tercer capitán del equipo. Sin embargo, no fue fácil el camino. Busi pudo ser del Real Madrid cuando era niño. La intervención de su padre, el ex portero Carles Busquets, fue clave.

En los tiempos en los que ocurrió esta historia, por el 2005, Busquets era jugador del Jàbac de Terrassa, en categoría juvenil. Era un futbolista bien valorado, especialmente por su entrenador, Sergio Lobera, que también llevaba al juvenil B del Barça. Sin embargo, desde el club azulgrana no le prestaban demasiada atención y a su padre se le puso la mosca detrás de la oreja.

Consciente de que canteras como la del Valencia y la del propio Madrid habían mostrado un cierto interés por el actual 5 azulgrana, Carles Busquets pasó a la acción y llevó a cabo una perfecta jugada de ajedrez: pactó que Busi fuese a probar con el Madrid.

Derecho preferente

El Barça tenía un acuerdo de colaboración con el Jàbac, con lo que tenía un derecho preferente ante otros clubes en caso de que algún otro grande mostrase interés por algún jugador. Ello propició que llegase un fax a can Barça con los detalles de la convocatoria para las pruebas de Busquets en la Fábrica.

Alexanko, responsable del fútbol formativo del Barça en aquél momento, fue el primero en conocer la existencia de ese fax y se apresuró a concretar una reunión con Carles Busquets para aclarar el futuro de su hijo. Se convocó una cena en casa de José Padrós, dueño de la empresa de autocares que trabajaba con el Barça. Tres años depsués, Busi debutaba con el primer equipo a las órdenes de Pep Guardiola.