El entorno de Neymar ve a Messi como un problema a medio plazo

El delantero brasileño estuvo más apagado en el partido contra la Roma 

Neymar ha sido el gran líder del FC Barcelona durante los dos meses que Leo Messi ha estado lesionado. El delantero brasileño asumió los galones con desparpajo y se convirtió en el futbolista más desequilibrante y decisivo. Su felicidad simbolizó la evolución del Barça, pero su sonrisa parece haberse apagado con el regreso del crack argentino.

Con Messi, Neymar asume un papel secundario. El brasileño cede todo el protagonismo al 10 y es mucho menos egoísta en el campo. Está al servicio del argentino. Sin Leo, en cambio, Neymar ha mostrado todos sus registros sin complejos. Él era el epicentro del Barça y el jugador que ha llenado más portadas en los diarios deportivos.

El partido contra la Roma confirmó que Messi está por encima del resto. El 10 marcó dos goles y fue ovacionado cuando entregó la pelota a Neymar para que lanzara el penalti que erró el brasileño. Al acabar el partido, estaba mucho más comedido y apagado que en otras ocasiones. Messi, en cambio, estaba radiante. Sus compañeros temen que una lucha de egos pueda dinamitar a un equipo construido para hacer historia.

Aspira al Balón de Oro

El entorno de Neymar ya ha filtrado que el brasileño aspira a ser la gran referencia del Barça a corto plazo. También ha deslizado que quiere ganar el Balón de Oro en uno o dos años. Hasta ahora han asumido la autoridad de Messi, pero piden un mayor reconocimiento para el 11y un reparto de papeles más equitativo a partir de ahora.

Neymar, de momento, calla. Es feliz en el Barça, pero quiere la máxima proyección. También quiere un salario más acorde con su talento. Hoy, Messi gana tres veces más que él.