El ego de Cristiano Ronaldo ensucia la remontada

El trigoleador del Madrid tira de ironía para sacudirse las críticas y empañar el pase a semifinales

Fue noche de fortuna para Cristiano Ronaldo. Tres tiros entre palos y tres goles. El primero, de oportunista ante la pasividad defensiva del Wolfsburgo: solo tuvo que acompañar el balón a la red; el segundo, de cabeza a remate de córner ante la fragilidad del equipo alemán en el área; el tercero, de falta por la apertura de la barrera. Hat-trick y clasificación, a fin de cuentas. La excusa perfecta para mandar recados a la afición al final del partido. Sigue sin congeniar con el madridismo.

«Me critican, me critican… pero siempre estoy ahí», disparó Cristiano Ronaldo después del partido. El jugador asume que «en España es así», pero dejó la adolescencia hace tiempo y, dice, estas cosas ya no le afectan. «Estoy acostumbrado». No se desprende tal sensación de sus palabras, pullas, ego y orgullo. «Para ser una temporada mala no está mal, ¿no?», añadió CR7 ante los medios. Suma 46 goles en 42 apariciones este curso.

«La gente me critica mucho y acepto que al principio no estaba al nivel que los tenía acostumbrados», declaró Cristiano. Argumentó su bajón a «problemas físicos», pero de un tiempo a esta parte, presume de que su rendimiento «ha sido excelente». Ni una palabra bonita para para los aficionados. Sí la tuvo para el equipo: «Ha estado genial. Intenso». ¿Mensaje a Zidane?