El crack del Barça que avisa a Messi con un «me voy»

La directiva azulgrana se frota las manos con una posible venta jugosa

Tiempos de cambio en el FC Barcelona. Unos vendrán, otros se irán. El primero en llegar será el nuevo entrenador: Ernesto Valverde, salvo sorpresa de última hora.

Con el Txingurri también llegarán nuevos fichajes. Pero antes, deberá abrirse la puerta de salida a algunos jugadores que llevan tiempo en el vestuario.

Una de las parcelas más afectadas será la defensa. Hay dos nombres por encima del resto que suenan para decir adiós: Jeremy Mathieu y Javier Mascherano.

El defensa francés puede dar problemas porque tiene una ficha relativamente alta, en torno a los cuatro millones de euros, y sabe que nadie le pagará eso. Por tanto, lo normal es que intente agotar su contrato (expira en 2018).

Mathieu, fichado por Andoni Zubizarreta a cambio de 20 millones de euros en 2014 –un año antes lo podrían haber cerrado a mitad de precio–, cumplirá 34 años en octubre. La presente es su tercera temporada en el Barça, donde le han castigado.

El PSG entra en la puja

El otro señalado es Mascherano. Sin embargo, al Jefecito nadie tendrá que echarle. Él ha tomado la decisión de marchar este verano. Así se lo ha comunicado a su amigo Leo Messi: «Me voy».

El defensa argentino ya estuvo a punto de salir el pasado año, pero finalmente resistió a petición de Luis Enrique (y Messi, que siempre lo defiende).

Ahora, con el fichaje de Umtiti, es evidente que Masche ya no tendrá el mismo peso en el equipo. Y él tiene claro que su mayor deseo es jugar.

El internacional argentino todavía tiene buen cartel en el mercado pese a sus casi 33 años. Y ha recibido ofertas jugosas.

En estos momentos, el club más interesado es el PSG. Entidad de primer nivel en Europa que puede mantener el elevado salario de Mascherano, que ronda los 10 millones de euros brutos al año. Patrick Kluivert está al frente de la negociación.

Penalti con trasfondo

Tampoco se descarta que la Juventus también entre en la puja. No en vano, ya lo sondeó el verano pasado, cuando se llevó a Dani Alves.

El Barça intentará sacar algo por el traspaso del jugador, pero teniendo en cuenta que está totalmente amortizado no se descarta que le den la carta de libertad.

La cúpula culé cree que es una buena noticia desprenderse de su sueldo teniendo en cuenta que su rol irá menguando. Llegó en 2010 a cambio de 20 millones.

Mascherano termina contrato en 2019, así que intentará firmar un acuerdo por, al menos, tres años. Su objetivo es volver a jugar de mediocentro, la posición que ocupó en el Liverpool, en Argentina y donde reconoce que más le gusta jugar.

El penalti que lanzó el pasado miércoles contra Osasuna para estrenarse como goleador azulgrana no fue casualidad. No quería despedirse sin haber marcado.