Cristiano Ronaldo retrata el lado más feo del Barça (y deja a Messi por los suelos)

El vestuario del Real Madrid no aguanta al crack luso

Leo Messi ha vuelto a liarla. En el Camp Nou, con el Valencia como víctima, el astro argentino desató su ira y protagonizó la tormenta de goles entre los dos clubes (4-2). 

El de Rosario mandó un nuevo recado a Cristiano Ronaldo. No solo con sus dos goles, que los alejan en el Pichichi (25-19), sino con una nueva demostración de compromiso (presionando), compañerismo y espíritu de equipo. 

Cristiano está desesperado. Ve a Leo y la indignación le invade. En su opinión lo del delantero azulgrana no tiene mérito. Para él, gran parte de sus éxitos le llegaron porque el Barça le fichó a dos gregarios.

Lo que anhela Cristiano

Su amigo dentro y fuera del campo es Luis Suárez. El delantero es su principal escudero. Su entendimiento es evidente en cada encuentro. El uruguayo está al servicio del albiceleste.

Neymar no se atreve a chutar a puerta si no es con la bendición de Leo. El brasileño entendió a la perfección que el número uno en can Barça era Messi y respeta esta ley no escrita a rajatabla.

Da igual quién complete el once titular. Los otros ocho juegan para él. Sin discusión. Le buscan, combinan y se ponen en sus manos. Confían ciegamente en él. Además es recíproco. Siente que puede confiar en sus compañeros. A su lado el más torpe parece Maradona.

Lo que se ha labrado

Todo eso es lo que el luso querría en el Real Madrid. Pero lo que se encuentra cada día es algo completamente diferente.

Un Karim Benzema que hace la guerra por su cuenta y que se ampara en el beneplácito de Zinedine Zidane para hacer lo que quiera.

Un Gareth Bale que siente que nunca será la estrella del Real Madrid. Eternamente estará a la sombra de Cristiano. El galés se cansó hace tiempo de la situación. Ahora hace lo posible para no salir el día de mañana por la puerta de atrás. Sin haber conseguido labrarse un nombre en la entidad madridista.

Y un equipo que ya no confía en él. Que no le apoya y que ya no le tiene como referente ni en el campo ni en el vestuario. Su actitud en multitud de ocasiones y su bajo rendimiento ha llevado muchos de sus compañeros a girarle la espalda.

Los celos

Los celos poseen al delantero madridista y el vestuario del Madrid lo paga. El ambiente se enturbia. Por un lado los partidarios de Ronaldo.

Por otro los que ya le calaron. Los que ya no tragan con las excusas del portugués. Él también lo tuvo todo y nunca demostró estar a la altura del de la Masía