Bartomeu explota: el nuevo Camp Nou arranca envuelto en una maraña de polémicas

Las filtraciones, declaraciones cruzadas y acusaciones de 'pucherazo' provocan la ira del presidente del Barça

Josep María Bartomeu anda terriblemente enfadado. El presidente del Barça, con un carácter próximo, ha mostrado su cara más amarga en las últimas 24 horas. El máximo dirigente del club explotó este martes tras la elección del estudio de arquitectos que construirá el nuevo Camp Nou (el estudio japonés Nikken Sekkei con la colaboración de los arquitectos catalanes Joan Pascual i Ramon Ausió). Teme haber perdido el control en algunos aspectos.

Las filtraciones en el club son una realidad. El hecho de que La Vanguardia publicase cuál iba a ser el despacho ganador del concurso antes de que se hubiese tomado la decisión generó un revuelo inaudito en el Camp Nou. Bartomeu pedía explicaciones, buscaba culpables y desataba su ira. El diario catalán conocía el resultado antes de la votación.

Jordi Moix, comisionado del Espai Barça y miembro del jurado que debía tomar la decisión final, ha tratado de maquillar esta situación ante los medios. En declaraciones a Catalunya Ràdio asegura que La Vanguardia especuló tras haber considerado las distintas opciones. Sin embargo, es vox populi que las relaciones entre el Grupo Godó y el Barça son más que fluidas.

Las quejas de un arquitecto

Estas declaraciones contrastan con el malestar mostrado por los perdedores. Uno de los arquitectos derrotados, Josep Miàs, considera que las tres opciones descartadas se podrían haber ahorrado todo el esfuerzo de llevar a cabo la presentación si ya se sabía quién iba a ser el ganador.

Miàs ha reconocido sentirse decepcionado también en declaraciones a la radio pública catalana: «Hombre, si éramos cuatro y ya se daba el ganador faltando uno para exponer uno de los proyectos… La sensación es que los otros tres equipos hemos ido a hacer un acto totalmente prescindible».

Lluís Comerón, decano del colegio de arquitectos de Barcelona y miembro del jurado, también ha valorado el asunto en declaraciones a Ràdio Catalunya. Tras hablar con el molesto Miàs, asegura que no había nada decidido.

¿Falta de profesionalidad?

«Puedo asegurar, como miembro del Jurado, teniendo en cuenta que había tres miembros del Colegio de Arquitectos y otro arquitecto del Ayuntamiento, que entramos sin haber tomado una decisión. En este proceso, decidimos que ganaba este equipo», ha declarado Comerón.

Este enorme revuelo ha generado malestar en el Camp Nou. Bartomeu está que trina porque, una vez más, la junta directiva ha dado la sensación de falta de firmeza, como ya ocurrió con el caso Neymar, la sanción de la FIFA, el asunto de las esteladas contra la UEFA, o los recientes espionajes a Jaume Roures.

Comparaciones odiosas

Y lo peor de todo es que el nuevo proyecto se ha empezado a llevar muchas críticas. Así, a primera vista, no termina a de convencer al barcelonismo. Además, ya han empezado las comparativas con el proyecto Foster que presentó Joan Laporta. A tenor de las primeras impresiones, parece que el diseño despreciado gana por goleada: en imagen (aquél estaba inspirado en Gaudí), en precio (420 millones de euros por los 250 millones del proyecto de Foster) y en tiempo de ejecución (el de Foster hubiese estado terminado en 2012 si no se hubiese paralizado).