Ancelotti presiona para que siga, pero Florentino Pérez quiere cerrar la venta el 1 de enero

Carlo Ancelotti sabe muy bien que, por mucho que el Real Madrid se haya reforzado este verano con fichajes como los de David Alaba o Camavinga, la plantilla actual blanca es de un nivel muy inferior a la que tenía el italiano en su primera etapa en la casa blanca.

Es por eso que, al contrario de lo que tiene en mente Florentino Pérez, el míster no quiere perder más calidad. Y menos si esta pérdida se basa tan sólo en un argumento económico y la salida de alguno de sus jugadores no implica la llegada de recambios top.

El claro ejemplo de este enfrentamiento entre Ancelotti y Florentino es un jugador que, antes de la llegada del italiano, tenía pie y medio fuera del Real Madrid: Isco Alarcón.

Ancelotti quiere a Isco en el Real Madrid

Ta sólo hace falta echar un ojo a las estadísticas en los tres primeros partidos de Liga para darse cuenta de que Carlo sí que confía en Isco. El español ha jugado 127 minutos, casi la mitad de los disputados, y ha sido titular en dos de los tres partidos. Una tercera titularidad podría llegar ante el Celta, algo que Alarcón no vive desde hace años.

Es cierto que las lesiones de Kroos y Modric le han facilitado poder contar con más minutos, pero cuentan desde el entorno de Ancelotti que el técnico está encantado con el juego y, sobretodo, con la actitud de un Isco que, a diferencia de otros tiempos, sí que parece haber dado un paso al frente para revertir su situación.

El problema para el mediapunta, que estaría encantado de seguir en el club, es que parece que Florentino tiene muy claro que no lo quiere renovar y que, de hecho, si llega una buena oferta por él en enero, intentará convencer a Alarcón para que haga las maletas.

Isco tiene este curso para demostrarle, sobre todo a Florentino, que en el caso de cambiar de opinión y plantearle una renovación ésta sería muy a la baja, que este buen inicio de curso y su buen juego no son flor de un día.