600.000 euros a la semana: la vida de lujo de Neymar en París

El delantero carioca del PSG Neymar y su vida a todo trapo en la capital francesa

Neymar
Neymar

Cuando Neymar decidió aceptar la oferta del PSG hace ya unos veranos, muchos se quedaron con la boca abierta. Entre otras cosas porque todo hacia pensar que, viendo la buena relación que tenía el carioca con Messi y Luis Suárez en el Barça, el delantero brasileño no cambiaría el Camp Nou por ningún otro estadio.

Pero el dinero que le puso encima de la mesa Nasser Al-Khelaïfi llevó al brasileño a aceptar un cambio del que, como apuntaron desde su entorno, se arrepintió al cabo de poco. Sobre todo a nivel deportivo.

Y es que, por mucho dinero que esté ganando el carioca, el brasileño es consciente de que debe salir de París para poder volver a ganar títulos importantes. Eso sí, de momento, y teniendo en cuenta que no se descarta una posible renovación, está disfrutando de una vida de lujo en la capital gala.

La vida de lujo de Neymar

Entre otras cosas porque, como apuntan desde La Razón, los ni más ni menos que 600.000 euros que cobra a la semana el delantero le ofrecen la posibilidad de vivir a un nivel de vida al alcance de muy pocos.

Un Neymar que no vive precisamente en un pisito, sino en una mansión que le alquila a Gerard Depardieu por la que paga ni más ni menos que 14.000 euros al mes. Una viviendo en la que cuenta con 10.000 metros cuadrados de vivienda y jardines, piscina cubierta y otra exterior, sauna, baño turco y sala de juegos situada a las afueras de París.

En cuanto a sus medios de transporte, cuenta, como apuntan en el citado medio, entre otros, con dos Ferraris: un GTC4 Lusso de 300.000 dólares y un 455 Italia de 180.000. Para sus viajes en avión, Neymar no viaja como el resto de los mortales, sino que cuenta con un jet privado valorado en 7 millones de euros.

Un nivel de vida que su nómina en el PSG le permite y que es muy probable que no quiera dejar de disfrutar. De ahí que muchos aseguren que el carioca prefiera seguir engordando su bolsillo en París pese a renunciar a títulos mayores.