Piqué interviene en una bronca bestial en el Barça

Gerard Piqué no es uno de los capitanes del FC Barcelona, pero durante el último partido de Liga ante el Athletic Club ejerció como tal. Y no dentro del campo, sino en el vestuario.

Piqué, uno de los jugadores más respetados del equipo, tubo que intervenir para evitar que una situación fuera a mayores. El protagonista es ni más ni menos que Gerard Deulofeu, uno de los mejores amigos del central en el conjunto azulgrana.

Deulofeu anda muy molesto con su entrenador, Ernesto Valverde. El delantero no entiende como es posible que el se quedara en el banquillo y que, en cambio, el escogido para acompañara a Leo Messi y Luís Súarez en ataque fuera André Gomes.

Por si ya el hecho de no ser titular no le cuadró al catalán, cuando vino el momento de los cambios tampoco fue uno de los elegidos por Valverde para entrar en juego. Es más, sí que el sustituido fue Gomes pero el Txingurri decidió apostar por el lateral Semedo y así recolocar a Sergi Roberto en el centro del campo.

Una decisión, tanto la del once de inicio como la de las variantes durante el encuentro que hizo estallar a Deulofeu. Fue en ese momento cuando Piqué intervino y calmó a su amigo.

La Copa del Rey como aval

Y es que el joven extremo catalán no encuentra ninguna explicación sus continuadas suplencias en partidos importantes. Además, lejos de resignarse a tener un papel secundario como sí que hacen otros compañeros suyos –Arda Turán es el mejor ejemplo- Deulo aprovecha cada oportunidad que tiene para demostrar su valía.

Sin ir más lejos Gerard fue uno de los mejores jugadores del Barça en el último enfrentamiento de Copa del Rey. El buen partido realizado ante el Murcia era, según el extremo, motivo de sobra para pasar por delante de un André Gomés que cada partido que pasa juega peor que el anterior.

La paciencia de Deulofeu está empezando a agotarse. Quizás con la llegada del mercado de invierno, donde ya se habla de una salida de Gomes del club, el gran amigo de Piqué podrá volver a tener las oportunidades que hasta ahora no tiene y que, según él, se ha ganado de sobras.