“Patético, nefasto y paquete”. Messi salva una cabeza en el Barça (y no es Coutinho, ni Dembélé)

El capitán y el lío que incendia las redes sociales

Alegría desbordada en el barcelonismo. No es para menos. A no ser que los de Ernesto Valverde vuelvan a protagonizar un ridículo como el que hicieron la temporada pasada ante la Roma, el 3-0 logrado anoche en el Camp Nou les debe servir para pasar a la final y afrontar la vuelta en Anfield contra el Liverpool con cierta calma.

Un resultado que pudo ser incluso aún más abultado si Ousmane Dembélé no hubiese fallado un mano a mano en el último minuto. Eso sí, por mucho que la eliminatoria está más que encarrilada para los culés, muchos en las redes están cargando contra el que consideran principal responsable del mal juego de los azulgranas: Ernesto Valverde.

Messi salva a Valverde

Y es que en los foros pueden leerse comentarios como “Patético, nefasto y paquete”. No son pocos los que aseguran que el modelo de juego que plantea el vasco no encaja con la filosofía del club. Cierto que el Barça gana, pero ya no enamora.

Ernesto Valverde | EFE

Dejar a Arthur en el banquillo para dar entrada a Arturo Vidal fue una decisión que llamó mucho la atención. También el hecho de que el Barça renunciara a la pelota durante buena parte del encuentra a la espera de que Messi y Suárez (de nuevo Coutinho volvió a evidenciar que no es un jugador para este Barça) salvaran los muebles.

Y así fue. El capitán volvió a demostrar por qué es el mejor del mundo y, junto al uruguayo, salvaron la cabeza de un Valverde que vio como Klopp le ganaba la batalla táctica. Y de qué manera.

El Liverpool fue superior en muchos minutos y presionó y mostró una intensidad que desbordó a los culés. Salah hizo y deshizo como quiso y Ter Stegen volvió a ser fundamental. Una vez más.

Buena parte de la afición está muy contenta con el resultado y el juego ha pasado a ser algo secundario. Ganar la Champions es lo que cuenta, sea como sea. Eso sí, no son pocos los que no se esconden y critican abiertamente a un técnico que vio ayer como, de nuevo, la inspiración de Messi le salvó. ¿Será la última?.