
30 de mayo de 2017 (19:58 CET)
Le faltó tiempo para escapar de Barcelona. Así es la vida loca de Neymar. En cuanto levantó la Copa del Rey junto a sus compañeros en Madrid, se dio a la fuga.
Toda la familia del crack brasileño estuvo en el Vicente Calderón. Su padre, su madre, su hermana y un séquito de amigos suyos brasileños: los famosos Toiss.
Todos en comandita le estaban esperando al final del partido en la calle, frente a la puerta 51 del estadio del Atlético, que pasará a mejor vida.
De allí fueron a Barcelona y han tardado nada y menos en poner rumbo a Japón. No hay misterio: los contratos publicitarios mandan. Hay mucho dinero en juego.
Sin embargo, este living la vida loca de Neymar podría tocar a su fin con la llegada de Ernesto Valverde al banquillo azulgrana.
Alerta roja
En el Barça ya están escarmentados con las idas y venidas del delantero. Y desde el nuevo cuerpo técnico querrán imprimir mano dura.
Neymar tendrá un año de margen para demostrar que es el líder que todos esperan. Nada de visitas a Brasil en plena temporada tras casuales coincidencias con las sanciones.
Nada de fiestas y noches descontroladas en la capital catalana, donde son hasta conocidos los rincones más secretos que frecuenta el futbolista.
Si Neymar no es capaz de acatar las normas, y dar un paso al frente, el club se planteará seriamente venderlo y atacar el fichaje de otro crack. Por ejemplo, Paulo Dybala.