Messi ya no ríe las gracias a Neymar (y cuenta lo que hacía fuera del Barça)

El argentino se distancia del brasileño y lo deja por los suelos

Cambio de discurso. Se acabaron las gracias y los sentimentalismos. Leo Messi ha decidido hacer un cambio respecto a sus declaraciones públicas en referencia a su ex compañero Neymar.

Si hasta hace muy poco el argentino siempre decía que echaba de menos a su amigo ‘Ney’, ahora es todo lo contrario. Sin ir más lejos, hace apenas unos días el delantero del Barça declaró en una entrevista que “La marcha de Neymar ha supuesto un cambio en nuestra manera de jugar. Perdimos mucho potencial ofensivo pero nos ayudó defensivamente. Ahora estamos muy bien armados en el centro del campo. Tenemos más equilibrio y eso nos hace más fuertes en defensa».

Unas declaraciones que dejan muy claro que Leo ya no tiene al brasileño entre su lista de amigos cercanos. Y es que Messi sabe muy bien que lo que el cracks del PSG quiere es ir al Real Madrid para poder competir de tú a tú con él.

Se abre la veda

Messi tiene una cosa muy clara: Neymar quiere superarle. Quiere ser el mejor del mundo y por eso, entre otras cosas, dejó el Barça. Estaba cansado de estar a su sombra y de ahí su marcha a equipo parisino.

Pero el ‘plan’ de los Neymar (Júnior y Sénior) es ser el nuevo galáctico de Florentino y batallar con Leo en la Liga y en Europa. Un fichaje, el del brasileño por el Madrid, que cada día parece más claro y que ha propiciado que, ahora que ya están todas las cartas encima de la mesa, varios pesos pesados del vestuario blaugrana hayan decido explicar cómo era la vida del astro lejos del Camp Nou.

Noctámbulo

Entre ellos Messi que ahora cuenta a sus más íntimos las fiestas locas del brasileño en la capital catalana, sus escapadas a discotecas, incluso como, en ocasiones, se borraba de partidos.

Y todo con el consentimiento de un Luis Enrique que no podía hacer nada. ¿Por qué? Porque Ney estuvo amenazando al Barça con no renovar e irse si no le dejaban vivir la vida a su manera.

Una vida que, según parece, sigue teniendo ahora en París y que Florentino Pérez ya conoce. Veremos si cuando llegue (si es que llega) a Madrid sigue apostando por vivir cuando se pone el sol o se centra en el balón y el césped.

Lo que está claro es que la amistad con Messi y con varios pesos pesados del vestuario blaugrana ya no será la misma.