“Messi, ¿por qué lo tapas?”. El escándalo en el Clásico que mantiene con vida a Sergio Ramos, Vinícius, Benzema (y al Real Madrid)

Culés y madridistas empataron en el partido de ida de la Copa del Rey

Barça y Real Madrid han dejado todo para el partido de vuelta tras empatar 1-1 en el partido de ida de las semifinales de la Copa del Rey en el Camp Nou.

El Real Madrid dio primero

En la primera parte, los blaugranas notaron la ausencia de Messi y no encontraron la forma de hacer daño a los madridistas. Más aún, cuando en el 6’, Lucas Vázquez se adelantaba a Lenglet y aprovechaba un pase de Benzema para hacer el primero en el marcador.

Lucas Vázquez lo suelta todo (o Sergio Ramos lo sabe. Y es muy duro) | EFE

Un duro golpe para los de Valverde que tenían como premisa principal no encajar gol. Sin embargo, no solo no encajaron, sino que no consiguieron batir a Keylor Navas en los primeros 45’. Sólo Malcom, en el extremo derecho, lo intentó con más corazón que calidad y cabeza.

Malcom y Messi cambiaron el partido

Tras el descanso, Malcom empató el partido en el 56′. Una buena juagada por la banda izquierda continuó con el lanzamiento al palo de Luis Suárez y con el posterior rechace que el extremo carioca aprovechó para igualar el marcador. Ese tanto y la entrada de Messi en el terreno de juego fue un punto de inflexión y el Barça se hizo con el dominio del encuentro. 

Malcom | EFE

De ahí al final, lo intentaron los catalanes, pero sin premio ante un Real Madrid que empezó muy bien. Sin embargo, en la segunda mitad perdió todo el dominio y volvió a demostrar que no es el mejor Madrid de la historia, ni mucho menos. E incluso, si no llega a ser por la lesión del argentino, muchos apuntan que podría haberse dado otro resultado. 

Coutinho, señalado una vez más

Pero, lo peor de todo esto no es el resultado. Si no las dudas que han vuelto a dejar algunos de los futbolistas que están llamados a marcar la diferencia en el equipo blaugrana.

El más señalado es Coutinho. El brasileño es el fichaje más caro de la historia del Barça y todavía no ha demostrado nada para rentabilizar los 140 millones de euros que costó. Valverde le ha dado la posición dónde más cómodo se siente, pero ni así rinde.

Fue un fichaje prometedor, que llegó en el mercado invernal y pagando los culés la cantidad que pedía el Liverpool, sin esperar a junio para que se pudiera adaptar mejor y comenzar desde el inicio la temporada.

Sin embargo, ya está temporada sigue sin adaptarse. No encara con peligro, no crea problemas a la defensa contraria, no defiende y tampoco da muestras estar comprometido. No sólo parece que no está al nivel de un futbolista que ha costado tanto, sino que su profesionalidad está empezando a ponerse en duda.

El técnico culé le ha dado una nueva oportunidad, con Dembélé lesionado, pero estuvo, una vez más, desaparecido durante todo el partido. Sin Messi no tiene conexión con la parte delantera y no hay síntomas de que vaya a mejorar.

“¿Por qué lo tapas?”, le recriminan a la estrella argentina, que todavía no se ha pronunciado sobre el estado de forma y la actitud tan deplorable de Coutinho, a pesar de que todos en el vestuario le consideran ya un jugador de ‘medio pelo’.

Malcom, ejemplo para Coutinho

En el otro lado y en el que se podía fijar el extremo ex del Liverpool es en Malcom. El brasileño no cuenta con una gran calidad y es más un jugador de agitar los partidos, pero con ímpetu y sacrificio ha demostrado en este Clásico que puede cumplir en la banda del Barça.

Lenglet también criticado

Este resultado deja también tocado a Lenglet. El francés es otro de los fichajes de los últimos años para tapar el problema que tienen los azulgranas con el centro de la zaga. Aunque, en un partido importante como el de hoy, volvió a demostrar que no está al nivel.

Clement Lenglet prensa

Se comió el gol de Lucas Vázquez, que le gano la partida por cuerpo, cuando el gallego tiene mucha menos corpulencia, estatura y envergadura que el defensa francés.

Queda el partido de vuelta, pero lo ocurrido hoy en el Camp Nou deja muchos damnificados y en el vestuario culé se siguen preguntando por qué hay jugadores que todavía siguen en la plantilla y cómo Solari, un entrenador que lleva muy poco tiempo en esto, pudo ganarle en la pizarra a Valverde, sobre todo en la primera parte.