Messi no se lo cree. Y es verdad (o el ridículo más bestia del Barça)

La mano por la cara. Mientras en el FC Barcelona andaban trabajando en la reestructuración de la secretaría técnica, el Real Madrid se ha llevado a una de las perlas del fútbol brasileño que tenía el Barça en cartera: Rodrygo.

Florentino Pérez  ofreció al Santos 45 millones por el jugador, cinco menos de lo que marcaba su cláusula, pero más del doble de los 20 que ofreció el Barça, y el club carioca aceptó.

Asimismo, al jugador los culés le ofrecieron poco más de un millón de euros, mientras que Florentino le pone directamente un sueldo de 7 ‘kilos’. A ello hay que sumar que el jugador posee en 20% de sus derechos federativos, con lo que 9 de estos millones irán directamente al bolsillo del sudamericano.

Algunos ven estas cifras desorbitadas, y más por un jugador de 17 años, igual que ocurrió con Vinicius Jr, pero la realidad es  que Pérez le ha vuelto a pasar la mano por la cara al Barça.

Florentino mueve el equipo y el Barça el organigrama

La noticia de la contratación del jugador del Santos por parte de los blancos se supo esta semana, antes de que el club catalán anunciara las incorporaciones de Eric Abidal y Ramón Planes al organigrama del club. En el Camp Nou se despistaron un momento y les robaron la tostada.

En otras palabras, mientras los responsables culés remueven los puestos de los directivos, en la casa blanca trabajan para el equipo. El que en la capital hayan contratado a un jugador mientras andan buscando al nuevo entrenador es buena prueba de que, a diferencia de los mandatarios culés, lo que realmente les interesa a los merengues es tener el mejor equipo del mundo sobre el césped.

Messi y compañía alucinan

Un asunto que no debe tener nada contentos a los pesos más pesados y sobre todo a Leo Messi. El argentino renovó por el equipo de la ciudad condal bajo la condición de que le construyeran el mejor equipo alrededor para los próximos años.

Pero hasta ahora lo único cierto a día de hoy es que, salvo Phillippe Coutinho, el resto de fichajes de la anterior secretaría técnica no ha terminado de funcionar. Y ojo, porque el  pagar 160 millones de euros por el brasileño tampoco demuestra haber hecho una buena gestión.

Para colmo, durante la resstructuración de la secratría técnica, a los dirigentes se les escapa Rodrygo, uno de los fichajes que podría marcar una época en el futuro del fútbol. Para Messi y compañía, el ridículo es espantoso.