Messi lo quiere. Sergio Ramos lo pide. Y ya negoció con el Barça (y el Real Madrid)

Es la sensación del momento. Las actuaciones de Saúl Níguez con la selección española contra Inglaterra y Croacia han puesto al jugador del Atlético de Madrid en la palestra del fútbol europeo.

Con un gol en cada choque y una influencia en el juego de la Roja brutal, el centrocampista colchonero se ha convertido en la nueva tentación del panorama futbolístico.

Florentino Pérez marca a Saúl en rojo

En este sentido, apuntaba Diario Gol este miércoles que a Florentino Pérez se le había pasado por la cabeza pagar los 150 millones de su cláusula para llevárselo a Chamartín.

Vistos los precios que corren por el mercado, no se trata de una cifra demasiado descabellada. Sobre todo por un jugador joven, contrastado y con experiencia tanto en LaLiga como en la Champions League, donde ya ha jugado dos finales siendo una pieza importantísima en los esquemas del Cholo Simeone. Saúl siempre fue un futbolista que gustaba mucho en Chamartín.

El Barça se suma a la puja

Pero este jueves Mundo Deportivo amaneció también con Saúl en portada, aunque en este caso es el FC Barcelona el que ha  mostrado su interés por el futbolista. Y no es nuevo.

Luis Enrique ya lo pidió en verano del 2016. De hecho, su gusto por el crack rojiblanco ha quedado demostrado en la Roja, donde le ha dado mucho protagonismo después de no haber disputado ni un minuto en el Mundial de Rusia. Y parece haber acertado.

También en el 2017 los culés estuvieron interesados en sus servicios, después de la salida de Neymar Jr. Pero el futbolista acababa de renovar con el club de la capital y se desvanecieron las opciones. 150 millones eran una cifra asequible para el conjunto culé, pero sería muy difícil convencerlo cuando justo acababa de estampar su firma en su nuevo contrato. El propio Gil Marín reconoció una llamada del Barça.

Dos intentonas que contaban con el beneplácito de Leo Messi, que siempre vio a Ñíguez como una buenísima incorporación para el sistema culé y para su propio juego.

Un interés que en la capital catalana no han perdido, donde no descartan a Saúl como una opción de futuro si así lo ven necesario en la entidad.