La mentira más gorda de Messi revienta (y deja al crack del Barça en jaque)

Ernesto Valverde deja al astro argentino fuera del once contra la Juventus

Sorpresa, y gorda, en la previa del Juventus-Barça. Don Lionel Andrés Messi no formará de inicio. No han trascendido los motivos pero se habla de decisión técnica.

En el entorno del Barça se comenta que Ernesto Valverde habría decidido dar descanso al astro argentino, que podría sufrir algún tipo de dolencia muscular. Y es que, más allá del partido clave contra la vecchia signora, el próximo domingo los azulgrana visitan Mestalla.

El duelo contra el Valencia promete ser de los más apasionantes de la presente edición de la Liga. Y es que el conjunto de Marcelino es segundo en la general a solo cuatro puntos del Barça. Además, tan solo han marcado un gol menos que los de Valverde: 33 a 32.

Todo esto ocurre en un claro contexto de mentiras, rumores interesados y filtraciones a la prensa en distintas direcciones. El origen de este despiporre no es otro que la renovación de Messi.

Josep María Bartomeu obvia pronunciarse al respecto de la cuestión. Pero en las últimas horas ha trascendido que Messi ni siquiera le coge el teléfono. Tampoco le devuelve las llamadas.

La rumorología ha ido en aumento al punto de sugerir, por enésima vez, que Pep Guardiola estaría tratando de convencerlo para llevárselo al Manchester City: una mentira de las gordas.

Obviamente que Guardiola, como cualquier entrenador del mundo, estaría encantado de contar con un jugador como Leo Messi en sus filas. Pero la realidad es que Pep no lo quiere en su equipo.

Y no es una cuestión de falta de talento, desconfianza o desprecio. Ni mucho menos. Es una cuestión que esconde dos argumentos irreductibles.

Dos motivos para no querer a Messi

El primero es que Guardiola no se atreve a tomar una decisión tan dura para la afición del Barça, que al fin y al cabo es la suya. Herir a su club pondría a muchos hinchas, socios y amigos en contra de Pep. Algo que lastraría sus opciones de regresar algún día, en el futuro, a la entidad catalana.

De otro lado, es conocido que las relaciones entre Messi y Guardiola se tensaron durante su último año en el Barça. Si bien siguen siendo cordiales de cara a los medios, en persona son muy frías.

Las pocas veces que han coincidido desde que Pep se fue, en 2012, apenas se han saludado. Lo máximo que han cruzado ha sido un “qué tal”, “cómo te va”, “suerte”, “cuídate” y “que vaya bien”.

Esta situación, todavía latente entre ambos pese al paso de los años, el respeto y la admiración mutua existente, hace inviable pensar en volver a verlos en un mismo equipo. Messi se queda