La infidelidad de Pique de la que hablan todos en el Barça

El pasado más oscuro del central que corre como la pólvora en club catalán

«No tengo la motivación de vestir otra camiseta, ahora juego al fútbol simplemente porque juego en el Barça. Si jugara en otro club, lo más probable es que lo dejara», dijo Gerard Piqué esta misma semana.

El central realizó estas declaraciones durante el acto que celebró en el Camp Nou con motivo de la renovación del futbolista con el club catalán hasta el 2022. Con este acuerdo, el central seguirá siendo jugador blaugrana hasta que cumpla 35 años y si lo cumple habrá pasado 14 años como profesional en el que señala como la entidad de su vida.

El oscuro pasado de Gerard Piqué

Pero no es oro todo lo que reluce. Hubo un tiempo en el que este amor hacia el Barça no era tan puro y en el que el defensa no dudó en dar la espalda al equipo azulgrana.

Ocurrió en el 2004, cuando Joan Gaspart presidía un club que atravesaba una larga época de sequía.

Entonces Piqué jugaba en el Juvenil A y desde los despachos culés le ofrecieron renovar a razón de siete años. La propuesta no gustó nada al zaguero, que reclamó seis años de contrato, pero que no obtuvo del club la respuesta que esperaba. Y es que no solo no le renovaron sino que le relegaron al Juvenil B.

Cuando Piqué dejó tirado al Barça

La decisión molestó tanto a Gerard que no dudó en iniciar diferentes negociaciones con el Arsenal, el Chelsea y el Manchester United al margen del club.

El asunto desembocó en la salida del barcelonista rumbo a Old Trafford. Los red devils se llevaron el gato al agua, después de negociar en secreto con el jugador y de abonar algo más de cinco millones de euros al equipo de la ciudad condal.

Allí permaneció dos temporadas antes de salir cedido al Zaragoza. Un año después de recalar en La Romareda regresó al United, donde estuvo un curso más antes de volver al Barça, previo pago de los culés de cinco millones de euros.