Florentino Pérez desata un efecto dominó: 180 millones al Barça (y es un intocable de Messi)
El presidente del Real Madrid pasa al ataque en una operación que pone los pelos de punta a Bartomeu
Al ataque. Y sin piedad. Florentino Pérez no da manga ancha al eterno rival. El presidente del Real Madrid tiene entre manos una operación ambiciosa que podría desestabilizar en el Camp Nou.
El empresario tiene entre ceja y ceja mejorar la plantilla de Zinedine Zidane para el próximo curso. Siga o no siga el técnico galo, hay que llevar a cabo una revolución.
Contra el Girona quedó patente que la defensa blanca atraviesa un mal momento. Tampoco Keylor Navas, en la portería, está para tirar cohetes.
Los datos son sonrojantes: el Madrid lleva encajados 33 goles en Liga y otros nueve en Champions. El Barça tan solo ha recibido 13 goles en el torneo doméstico y dos en Europa.
El movimiento que tiene pensado llevar a cabo Florentino es el fichaje de David de Gea. El portero titular del Manchester United podría regresar a su ciudad.
El presidente del Madrid hará todo lo que esté en su mano para que así sea. Pero sabe que generará un efecto dominó que puede traer cola.
De Gea, al Real Madrid
Si el United de José Mourinho se queda sin De Gea –el entrenador luso ya avisó que no cree que esta operación sea factible– irá a por otro crack en el mercado.
Uno de los porteros de moda en Europa es Gianluigi Donnaruma. Aunque es sabido que le gusta a Mou, parece que el PSG ya lo tendría hecho para llevárselo del Milan.
Esto significa que el United tendría que ir a por otro crack. Y tampoco hay tantos de nivel top en el mercado. Y menos a la altura de De Gea.
Es por este motivo que los red devils, en caso de no poder retener a De Gea –que lo intentarán hasta el final– se verían forzados a ir a por dos jugadores que están en racha este curso.
Mourinho, a por Ter Stegen
Uno es Jan Oblak, del Atlético de Madrid y protagonista de un año brillante. El otro es el portero del Barça, Marc-André ter Stegen.
Aunque no parece probable que Ter Stegen acepte hacer las maletas de Barcelona, donde se siente como en casa y completamente adaptado, ya se sabe cuán fuerte es el poder del dinero.
La cláusula del guardameta azulgrana es de 180 millones de euros. Si la pueden pagar y ofrecen al portero un mejor sueldo, la jugada de Florentino habrá salido redonda. Y a Josep María Bartomeu se le ponen los pelos de punta.
