El secreto que esconde el fichaje urgente de Coutinho por el Barça

En tiempos de vacas flacas, nunca viene mal un fichaje mediático. De relumbrón. De esos que llenan portadas y generan ilusión.

Ese fue el efecto que pretendía dar Josep María Bartomeu con el fichaje de Ousmane Dembelé el pasado verano. Era necesario un golpe de efecto.

Amenazaban tormentas. Con una moción de censura sobre la mesa, la marcha de Neymar a traición y el doblete del Real Madrid, las cosas se habían puesto muy feas.

Había que cerrar una gran operación y Dembelé fue el elegido: 105 millones de euros fijos más 20+20 en variables por un joven talento que todavía no ha demostrado nada.

En el Camp Nou pronto saltaron las voces de alarma. Y no por la mala fortuna del ariete francés en su presentación, cuando se trastabilló con el balón presa de los nervios.

Los que entienden de fútbol apuntan que, quizá, Dembelé no era el fichaje que necesitaba el Barça. Si bien es cierto que abre el campo y es muy veloz, el regate no es su principal virtud.

El equipo que entrena Ernesto Valverde –al que ya todos coinciden en señalar como el gran fichaje del verano, por encima del sorprendente Paulinho– necesita alguien que se maneje bien en los espacios reducidos. Algo que ya se comentó tras el fichaje de André Gomes.

Los futbolistas con buena zancada y que van muy bien al espacio pueden ser útiles en momentos concretos. Pero más importante es que sepan generar peligro en una baldosa.

Como hacía Neymar, como hace Iniesta, o como siempre ha demostrado el mejor del mundo: Leo Messi. En el cuerpo técnico del Barça no tienen claro que Dembelé sea ese perfil.

Sin embargo, un fichaje tan costoso contará con todas las oportunidades y apoyo del mundo para encauzar su adaptación. Ese es el objetivo. Lo que todos quieren.

Coutinho, fichado 

Pero, precisamente, esa intuición que hace pensar en un posible error con su fichaje, el más caro de la historia, es lo que está precipitando la llegada de Philippe Coutinho. Ya está fichado. 

El brasileño llega con urgencia este enero para ser, él sí, el fichaje estrella del Barça esta temporada. El futbolista capaz de marcar las diferencias en espacios cortos y de servir la mejor asistencia. Es el elegido por Leo Messi y Luis Suárez. 

Coutinho también tiene gol, más que Dembelé, pero será muy importante para atar la Liga. Y, sobre todo, para dar descanso a Andrés Iniesta.

El manchego es el verdadero genio del medio campo azulgrana, pero su forma física le impide rendir simpre a nivel de estrella. Bien dosificado, puede mostrar su mejor versión en la Champions, mientras Coutinho complementa su adaptación asumiendo galones en Liga.

La contratación del brasileño está prácticamente cerrada. Bartomeu pagará 120 millones de euros fijos más otros 40 millones en variables: 20 de fácil cumplimiento y 20 no tanto.