El feo de Piqué fuera de cámara en el Santiago Bernabéu

El central se quiso alejar de la polémica

El partido de España ante Italia sirvió para dejar prácticamente decidida la clasificación de España para el Mundial de Rusia como primera de grupo, pero también fue un nuevo plebiscito.

La presencia de Gerard Piqué en el centro de la defensa de la selección española sigue generando polémica a cada partido. Pese a las muestras públicas de apoyo que dieron sus compañeros, el zaguero volvió a escuchar pitos.

Cada vez que tocaba el balón se escuchaba un atronador concierto de viento, aunque algunos aficionados rompieron una lanza a su favor con cánticos de “Piqué, Piqué”.

El partido del barcelonista fue correcto, y no pareció verse afectado por su habitual banda sonora. Pero al acabar el partido, dejó un gesto que mostraba su malestar.

Ignoró a los medios

Nada más sonar el pitido final, Gerard Piqué se retiró al vestuario. Poco después salió al césped de nuevo para jugar con sus hijos una vez los espectadores se habían marchado. Un respiro de paz en un campo poco amistoso con él.

Tras la pequeña desconexión con los pequeños, volvió a la caseta para cambiarse. Pero al terminar, al contrario de lo que suele ser habitual en él, no dedicó ni un minuto para atender a los medios.

El defensor culé y de la Roja pasó de largo en la zona mixta. En el día en que España había protagonizado uno de los mejores partidos de la era Lopetegui, Piqué prefirió no dejar ningún recado.

Conociéndolo, seguramente tenga una bomba que soltar sobre su participación con España en el Santiago Bernabéu, pero ayer prefirió no hacerlo. Dejó a los medios tirados.