Di María desmonta al Barça (y calienta la cabeza a Messi)

El encuentro en la selección argentina destapa un problema en el club

Si en Brasil se han reencontrado Neymar y quién sonaba como sustituto natural –Coutinho– en Argentina la instantánea la protagonizan Leo Messi y el que debería haber sido su compañero –Ángel Di María.

El calendario internacional está dejando imágenes con mucho morbo ante lo que podría haber sido y no fue. Pero el caso de Di María ha irritado mucho a Messi.

Ante los múltiples intentos fallidos para contratar a un centrocampista por parte del FC Barcelona, a última hora surgió la idea de tratar de convencer al Fideo. El rosarino puede jugar tanto de extremo como de interior y daría el plus de dinamismo que necesita Ernesto Valverde.

Las negociaciones con el Paris Saint-Germain, no obstante, fueron tan infructuosas como el resto de veces que el Barça ha llamado a la puerta de Nasser Al-Khelaifi. Se ha topado con la misma negativa que recibió por Verratti y Marquinhos.

El esfuerzo no tan titánico

Di María se ha reencontrado con Messi para disputar los partidos clasificatorios del próximo Mundial, y ha dejado clara al diez culé la verdad sobre su posible traspaso.

El Barça nunca fue en serio a por él. La maniobra se llevó a cabo para distraer la atención de la operación de Coutinho y tratar de presionar al Liverpool a la vez que se desestabilizaba al PSG.

Después de los 40 millones de euros pagados por Paulinho, la primera oferta que llegó a Francia por Di María fue de 25 millones de euros. Un precio que claramente iba a ser rechazado y que sólo subió a 35 en el último día de mercado.

Ante la falta de mordiente azulgrana, el PSG desestimó traspasar al ex madridista. La venta que necesitaban para cuadrar sus cuentas frente al fair play financiero fue la de Serge Aurier y el Barça ha cerrado una plantilla que sobre el papel no parece suficiente para competir por todos los títulos.