Coutinho no se habla con un crack del Barça (y te contamos quién es)

El nuevo fichaje galáctico de Bartomeu para Valverde sabe a qué juega

Debutó a lo grande contra su ex equipo, el Espanyolde Cornellà”, como suele decir Gerard Piqué para provocar a los pericos.

Philippe Coutinho hizo un gran partido en su estreno, de apenas 30 minutos. Pisó la hierba del Camp Nou en sustitución de un grande, Andrés Iniesta.

Y aunque todo el mundo se empeña en atribuir a Coutinho la condición de heredero de Iniesta, lo cierto es que su rivalidad en el vestuario va por otros derroteros.

La verdadera amenaza de Coutinho –aunque todo indica que es más bien al revés– es Ousmane Dembelé. Actualmente lesionado, la sintonía entre ambos es nula.

Son los dos fichajes estrella y en el Camp Nou ya se notan los celos. El problema no es esta temporada, sino el futuro.

Coutinho queda para quedarse. Hasta final de temporada su rol será muy sencillo: titular en Liga, mientras que Iniesta lo será en Copa y Champions. Aunque también pueden jugar juntos.

De hecho, y si las prestaciones de Coutinho van por el camino que aparentan, es muy probable que manchego y brasileño compartan minutos en la eliminatoria contra el Valencia.

Si Dembelé estuviese, también sería una opción verlos juntos, pero de momento Iniesta está por delante. Si Coutinho juega de falso extremo por la izquierda para que el internacional español esté de interior, Messi pasa a la derecha. Y Dembelé, al banquillo.

Dembelé y Coutinho, empiezan los celos

Ahora no pasa nada. El extremo francés está lesionado y no parece que vaya a reaparecer en la Copa del Rey. La gran duda llegará cuando el Barça juegue contra el Real Madrid.

¿Quién se quedará en el banquillo? Dependerá del rendimiento que demuestren hasta entonces. Todavía quedan meses para el clásico.

Pero todo hace pensar que Valverde contará con la dupla brasileña, Paulinho y Coutinho, en Liga, mientras que Iniesta y Dembelé jugarán más la Champions.

¿Y el año que viene? Es ahí donde radican los miedos del galo. Con la probable llegada de Antoine Griezmann no habrá sitio para todos. Irán rotando, pero a la hora de la verdad el principal señalado será Dembelé.

El motivo es fácil, es el que está más lejos de adaptarse al sistema, de encajar en el equipo. También es el más joven y tiene margen de maniobra para aprender y mejorar.

Pero no se le escapa toda esta situación. El fichaje de Coutinho ha sido un alivio temporal, le quita la presión de ser el fichaje más caro de la historia con solo 20 años.

Sin embargo, a la larga será un problema. Dembelé lo sabe. Coutinho lo sabe. Y, por el momento, la relación entre ambos es casi inexistente.