“90 millones”. Y Messi da luz verde. Operación galáctica en el Barça: casa, contrato y ficha

La bomba que pone patas arriba el Camp Nou

​Leo Messi volvió a demostrar anoche ante el Sevilla que, cuando su Barça se pone, es capaz de ganar a quien quiera y como quiera. Entre otras cosas porque la gran mayoría de sus jugadores están en un buen  momento de forma.

Los pesos pesados como el propio Leo pero también Suárez, Coutinho, Busquets, Piqué y compañía se han puesto a tono ahora que llegan los meses clave.

Pero hay un jugador que tiene especialmente maravillado al capitán blaugrana. Y ese no es otro que Arthur Melo. El brasileño fue ante los andaluces uno de los mejores en el terreno de juego y parece haber cogido ya las riendas de un centro del campo que cada vez luce mejor.

Sin embargo, ese ascenso del carioca tiene un perjudicado: Ivan Rakitic. El croata ha perdido peso en el equipo y ya no es visto por los capos como un jugador imprescindible. Y más tras la confirmación del fichaje de Frenkie de Jong y a la espera de ver qué sucede con Adrien Rabiot.

Rakitic | EFE

Todo parece indicar que el centro del campo del futuro será Busquets, De Jong y Arthur con Riqui Puig en la recámara.

Messi da luz verde

Y el propio Ivan lo sabe. Sabe que en el club tiene en mente venderlo este próximo verano. De hecho, cuentan desde dentro que, si el jugador hubiese dado el ‘ok’ el Barça lo hubiese vendido el verano pasado al PSG.

Pero Rakitic quiso quedarse. Ahora, por mucho que en público vaya diciendo que su idea es la de renovar, el balcánico ya está estudiando las diferentes propuestas. En la directiva lo tiene claro: si llega alguien con “90 millones” se irá.

 De hecho, el entorno del centrocampista ya habla de un fichaje y una ficha de galáctico en París, donde más de uno ya está buscando casa para el balcánico. No es segura su marcha, pero la rotundidad con la que dijo ‘no’ hace unos meses se ha convertido en dudas.

Sabe Rakitic que está a las puertas de su último gran contrato, pero en el Barça no están por la labor de aumentar más la presión a la masa salarial con una renovación. Veremos donde acaba, pero Messi ya ha dado su ‘ok’ a una hipotética salida.