Cristiano Ronaldo desatado en el Bayern-Real Madrid: “Pregúntale a Messi” (o por qué el Barça no juega la final de la Champions)

Los hombres de Zidane vuelven a demostrar su casta imparable en Europa

Llegó la hora de la verdad. Y el Real Madrid volvió a responder. En la Champions se crecen.

La Copa de Europa es la competición por excelencia de los blancos y lo volvieron a demostrar en la ida de la segunda semifinal de la Liga de Campeones.

Los de Zinedine Zidane no necesitaron firmar un buen partido para superar al Bayern de Múnich (1-2). Los alemanes tuvieron más ocasiones, pero por puro ímpetu.

A nivel de fútbol, ambos conjuntos mostraron muchas limitaciones, pero la calidad de la plantilla blanca es superior a un Bayern envejecido.

Jupp Heynckess, apurando los días para su segunda jubilación, contó con la vieja guardia: Robben, Ribery y Muller como escuderos del verdadero crack bávaro, Robert Lewandowski.

El extremo holandés, como en los viejos tiempos, se lesionó a los siete minutos de encuentro y condicionó el duelo. Thiago Alcántara entró en su lugar para compartir espacio con James Rodríguez.

Los teutones tiraban de garra y empuje. Y así llegó el gol, en una jugada extraña de Kimmich que sorprendió a un Keylor Navas que está para el arrastre.

Asensio liquida

Cuando mejor estaban los alemanes, constantemente al filo del segundo gol, llegó el empate del Madrid. Los germanos perdonaron y Marcelo marcó un golazo.

Se nivelaron las fuerzas tanto al final del primer tiempo como al principio del segundo. Hasta que Rafinha cometió un error fatal que Marco Asensio no perdonó.

El balear fue suplente pero Zidane lo introdujo de inicio en la segunda mitad para relevar a un apagado Isco. También entró Benzema en la segunda, por el lesionado Carvajal. Y Lucas Vázquez asumió el control del lateral derecho, lidiando con un activo Ribery.

ribery james

El Madrid no fue para tirar cohetes. Cristiano Ronaldo ni apareció, pero ello no le impedirá ganar el Balón de Oro y el The Best porque el equipo tiró de oficio una vez más. Y de eso que el Barça adoleció en Roma: intensidad, orgullo y ambición.

La decepción de Messi en Roma

Todavía muchos hinchas de Barcelona se preguntan qué le pasó al conjunto de Ernesto Valverde.Pregúntale a Messi”, es la respuesta más generalizada.

Si el pequeñín hubiese querido, el Barça estaría luchando por la final. Pero no la jugará. La Roma se la levantó en la noche más oscura de la era Valverde.

El Barça falleció y el Madrid lo tiene todo de cara para ganar la tercera Champions consecutiva. La decimotercera. Los azulgrana eran los únicos que lo podían impedir. Y se achantaron.

Pensando en el Mundial

En el vestuario del Barça daban por hecho que el cruce con el Madrid se iba a dar tarde o temprano. En semifinales o en la final. Y daba mucho miedo.

asensio kroos cristiano carvajal ramos

El desgaste, el peligro de lesiones, suponían una presión añadida para aquellos que se juegan el Mundial. Concretamente para Messi, hay mucho en juego este verano en Rusia.

La falta de ambición, dejadez incluso, que mostró el Barça en el Olímpico de Roma contrastó con la actitud de los pupilos de Zidane en el Allianz Arena. El Real Madrid se sigue creciendo en Champions.