La bronca de Messi en la media parte del Villareal-Barça (¡Bestial!)

El crack argentino, como nunca lo habían visto sus compañeros

La victoria del Barça en el campo del Villareal fue una de esas que hacen que se ganen ligas. O al menos que no se pierdan. Y es que a los de Ernesto Valverde les costó un mundo llevarse los tres puntos.

De hecho, no fue hasta el final del partido cuando el Barcelona pudo adelantarse en el marcador. El gol de Luis Suárez calmó los ánimos del conjunto azulgrana que veía como se le escapan dos puntos en un partido clave.

Pero no fue casual. La diferencia de juego que desplegaron los culés entre el segundo y el primer tiempo del partido tiene un culpable: Leo Messi. El argentino ejerció de capitán y alzó la voz como poas veces lo hace.

A gritos

Y es que ya cuando se iba hacia el túnel de vestuarios una vez el árbitro señaló el final de la primera parte, la cara de Messi era un poema. El argentino estaba muy cabreado con sus compañeros.

Sabía que el Barça debía ganar sí o sí, y más tras las victorias del Real Madrid y el Valencia, sus perseguidores en la tabla de la clasificación. De ahí que el delantero se liara a gritos espoleando y animando a sus compañeros a dar un paso adelante en el segundo tiempo.

Messi, capitán ante el Villareal, ejerció como tal y les puso las pilas al resto de jugadores. Debían subir varios niveles la intensidad para poder penetrar una muy buena defensa como era la del equipo amarillo.

Falta gol

Pero la bronca que tubo que pegar el astro va más allá del partido. El Barça tiene un grave problema con el gol. Sino marca Leo o Suárez –éste en mucho menor medida- no lo hace nadie.

De ahí que el club, con Valverde a la cabeza, está buscando un goleador nato que haga que no sea el ‘10’ el que tenga todo el peso goleador del equipo. Luís no esta teniendo su mejor año y combina un partido bueno con dos o tres. Los goles de Neymar se está echando mucho de menos.

A la espera de Dembélé, Leo ya sabe que debe ser él quien tire del carro, per cuando ve que sus compañeros no le acompañan es cuando alza la voz y, visto lo visto, todos siguen sus órdenes.